El presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Armin Dorgathen, afirmó que el complejo cruceño ya está montado y podrá iniciar operaciones a fines de este año, mientras que la factoría alteña estará concluida a mediados de 2024.
“Con estas plantas vamos a ahorrar el 10 por ciento de la importación de combustibles, lo cual es bastante y además vamos a tener un combustible amigable con el medio ambiente”, sostuvo en entrevista concedida al canal estatal Bolivia Tv.
Dorgathen describió que estas factorías coadyuvarán a reducir las emisiones de dióxido de carbono y dinamizarán la economía nacional, pues a partir de estas se impulsarán fuertes inversiones en el agro, se generará movimiento por la logística y el transporte desde las extractoras de aceite.
El titular de YPFB recordó que estas obras son parte de la política de industrialización con sustitución de importaciones, en cuyo contexto ya se convierten en una realidad.
Al iniciar la construcción de la Planta de Biodiésel II Héroes de Senkata, el 6 de marzo último, el presidente de Bolivia, Luis Arce, consideró que ese paso representa el inicio de un salto cualitativo.
“Hoy es un día importante, hoy damos un salto cualitativo en la ciudad de El Alto porque hoy ponemos la piedra fundamental para construir la planta de biodiesel y derivados en Senkata, en homenaje a este pueblo luchador”, expresó durante el acto de colocación de la piedra fundamental de inicio de obras, cuya edificación demorará un año.
Explicó el dignatario que la segunda fábrica de biodiésel de la nación andino-amazónica se suma a diferentes proyectos que se implementan, en particular en el norte, donde ya se produce soya, maíz y caña, entre otros productos que proveerán de materia prima a la nueva industria.
Arce enfatizó en que en homenaje a los muertos y heridos de las luchas en El Alto se construye aquí la primera planta agroindustrial del departamento de La Paz.
La nueva fábrica aportará también derivados del aceite vegetal, como la glicerina, elemento esencial para el fomento de la industria cosmética y farmacéutica, por lo cual Arce instó a los emprendedores del occidente a diseñar proyectos que asimilen la comercialización de estas producciones en esta región.
Significó que la industrialización fue una propuesta de la campaña electoral en 2020, “aumentar la producción, garantizar la seguridad con soberanía alimentaria, y créanme que poco a poco estamos cumpliendo ese deseo, ese anhelo de los bolivianos de tener un país industrializado”, concluyó.
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