Este país sufre de dicha tendencia en tiendas, dijeron voceros del comercio por departamentos, mientras que la cadena de moda Primark se sumó a los llamados del sector para que las autoridades tomen medidas enérgicas contra este problema.
Se transformó en un serio asunto que en el último año apreciaran el doble de delitos, declaró a BBC Radio la presidenta de John Lewis Partnership, Sharon White, propietaria de los grandes almacenes y los supermercados Waitrose.
White pidió al gobierno británico que cree una comisión para examinar los problemas a los que se enfrentan los centros urbanos, afirmando que corren el riesgo de convertirse en un terreno de saqueo para ladrones envalentonados y bandas organizadas.
Por su parte, el presidente ejecutivo de Associated British Foods, George Weston, propietaria de Primark, declaró que la cadena había aumentado el gasto en guardias de seguridad, cámaras de circuito cerrado de televisión y en equipar al personal con cámaras corporales para intentar combatir los robos en las tiendas.
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