Según un breve informa de Petroperú, el fuego, de menor proporción, se produjo al amanecer en la Unidad De Craqueo Catalítico Fluidizado, y fue sofocado en cinco minutos por el personal contraincendios de la empresa.
El reporte añade que el siniestro no causó daños personales y tampoco perjuicios materiales de consideración y las actividades de la refinería continúan con normalidad, mientras se investigan las causas de lo sucedido.
“Petroperú cuenta con planes de contingencia en todas sus operaciones para la atención oportuna de este tipo de incidentes e informar de manera oportuna a las autoridades competentes”, agrega el informe.
La flamante planta está en su etapa de pruebas previas al inicio pleno de sus operaciones, por lo que causó sobresalto la difusión por Internet de videos caseros que mostraron la humareda negra causada por el breve siniestro.
El incidente se produjo en el contexto de una fuerte campaña política, mediática y empresarial contra Petroperú, la cual logró esta semana revertir la decisión oficial de entregar al ente estatal antiguos lotes petroleros del zócalo continental del norte del país.
Esas áreas fueron privatizadas décadas atrás y los contratos de concesión a transnacionales están por terminar.
El ministro de Energía y Minas, Óscar Vera, anunció que los lotes serán licitados y mientras se realiza este proyecto, quedarán bajo control de Petroperú, mientras la campaña privatizadora exige que sigan en manos de los concesionarios privados.
El principal argumento de Vera y Petroperú para la entrega a la empresa estatal es el hecho de que la empresa estatal no tendrá casi que hacer inversiones, pues se trata de lo que el ministro llamó un negocio en marcha que da utilidades cuantiosas que hasta ahora benefician a privados.
Ayer fracasó en el Parlamento por falta de votos un intento de censurar (destituir) al ministro por motivos distintos al tema de los lotes norteños, pero este fue el tema central durante el debate, en el que la izquierda respaldó a Vera
Petroperú fue reducida a operaciones de refinación y comercialización por el gobierno neoliberal de Alberto Fujimori (1990-2000) y prohibida además de explorar y explotar hidrocarburos, actividades cuya recuperación es considerada una meta pendiente y necesaria por la empresa.
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