La pieza de más de 10 metros de altura, fue develada el domingo 13 de este mes, en esa ciudad, epicentro de la violencia y la represión policial contra los manifestantes pacíficos.
El senador de Polo Democrático Wilson Arias responsabilizó a la alcaldía de esa urbe y a su edil, Jorge Iván Ospina ‘de este nuevo atentado contra la memoria y sentimiento popular’.
Por su parte, Adolfo Rivas, fundador de la organización Ciudadanía Inteligente denunció que esta acción se trata de un atentado a la democracia.
Señaló que en la mañana de hoy la policía invadió Puerto Resistencia, detuvo a más de 50 jóvenes con la intención de tumbar el monumento.
‘En Cali igual que en Bogotá, le entregaron la secretaría de seguridad al uribismo’ (doctrina de los seguidores de las políticas del expresidente ultraderechista Álvaro Uribe), enfatizó.
Asimismo, el usuario en Twitter identificado como Connie, solicitó al alcalde preservar el monumento construido por los ciudadanos ‘recordándonos que la vida es un derecho fundamental por el cual hay que movilizarse cada vez que haga falta’.
La escultura es una mano que empuña un cartel en el que se lee Resiste y está ubicada en el sector de Puerto Rellena rebautizado Puerto Resistencia.
Para su construcción emplearon material reciclable aportado por las personas del sector tales como arena, cemento y pinturas, varillas de metal, entre otros.
Grupos de 25 personas que establecieron horarios de relevo con turnos de ocho horas, lo levantaron en 16 días.
La obra, de acuerdo con versiones de los participantes en su creación, representa la mano poderosa de Kay Kimi Krachi, un dios maya de la batalla.
También están representados rostros de muchos de los manifestantes asesinados por la fuerza pública en el contexto del paro nacional contra el gobierno de Iván Duque, que comenzó el 28 de abril.
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