En ese encuentro se discutieron temas extremadamente provocativos anti-RPDC, tales como el perfeccionamiento del plan de estrategia nuclear y la guía de su operación, y el sistema de disuasivo ampliado hasta mediados del año próximo, señaló la ACNC en un artículo.
La fuente advirtió que la gravedad del caso radica en que los ejercicios bélicos conjuntos de gran envergadura, que se escenificaban hasta ahora bajo el rótulo de «ofrecimiento de paraguas nuclear» y «protección» a los surcoreanos, se ejecutarán desde el año próximo para alcanzar la meta ofensiva de asestar el preataque nuclear contra la RPDC.
Su verdadera intención es tranquilizar a la camarilla títere surcoreana -y a la larga- alcanzar su meta principal de aplastar militarmente a la RPDC. Pero Estados Unidos debe tener bien presente que esta tierra no es la Península Coreana de la década de 1950, concluye el artículo.
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