Por lo menos 160 personas murieron entre el sábado y este lunes en varias aldeas del estado de Plateau en incursiones de hombres armados que se desplazan en motocicletas, según reportes a la prensa de las autoridades coincidentes con las de líderes tradicionales.
El estado de Plateau tiene una extensión de casi 31 mil kilómetros cuadrados, una población cercana a los cuatro millones de habitantes y limita al norte con el estado de Bauchi, al este y sudeste con el de Taraba, al sur con el de Nasarawa y al oeste con el de Kaduna.
Partes de fuentes oficiales certifican que entre el sábado y este lunes fueron atacadas por lo menos 20 aldeas en lo que tuvo todos los ribetes de operaciones concertadas entre bandas diferentes diseñadas para sembrar el terror en las poblaciones.
La región se caracteriza por la diversidad de conflictos étnicos y religiosos agravados por la sequía, que obliga a los pastores fulani, musulmanes, a migrar al centro del país en busca de pastos que la población de esa zona, cristianos y animistas, consideran suyos.
Los ataques de los pandilleros, es uno de los más graves problemas heredados por el gobierno del presidente Bola Tinubu cuyo único éxito hasta ahora fue la muerte en un ataque aéreo el pasado día 10 de Yellow Jambros, uno de los más importantes jefes de pandillas.
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