Esos resultados incluyen los aportes de las labores de topografía, perforación y registro, según YPFB.
Una nota entregada a Prensa Latina por esa corporación describe que esos trabajos permitieron mitigar de manera efectiva el riesgo geológico asociado a lo que denomina “el prospecto Vitiacua”.
“Este avance sienta las bases para la próxima fase del proyecto, que consiste en la perforación del primer pozo exploratorio, actualmente en proceso de obtención de licenciamiento ambiental”, afirma en el texto la gerente de Administración Técnica de Contratos y Evaluación E&E de YPFB, Mayra Campos.
Añade que el proyecto sísmico es parte del Plan de Reactivación del Upstream (evaluación geológica de reservas, extracción y entrega final).
Indica que los trabajos realizados permitieron definir la estructura Vitiacua, ubicada al norte del campo Sabalo, con recursos de cerca de dos trillones de pies cúbicos (TCF) de gas, con condensado asociado.
“Apuntamos a ampliar las oportunidades exploratorias en Bolivia con la ejecución de este y otros prospectos exploratorios de beneficio nacional que contribuirán a incrementar la producción de hidrocarburos”, sostiene Campos.
YPFB encargó a la empresa Sinopec International Petroleum Service Ecuador S.A (Sucursal Bolivia) la ejecución del proyecto de adquisición sísmica 2D, realizado en los años 2022-2023 con una inversión superior a los 99,7 millones de bolivianos (14 millones de dólares).
Iniciado el 10 de agosto de 2022, ese trabajo concluyó el 22 de septiembre de 2023, con una adquisición y procesamiento de 166,26 kilómetros de sísmica 2D en los municipios de Machareti y Huacaya, en la provincia de Luis Calvo, departamento de Chuquisaca.
Según la fuente, el proyecto contó también con el reprocesamiento de 286 kilómetros de líneas sísmicas 2D preexistentes cercanas al área de estudio con los estándares más altos de seguridad y el cuidado del medio ambiente.
El método sísmico aporta imágenes del subsuelo, las cuales pueden mostrar zonas con características apropiadas para la acumulación de gas o petróleo.
“Además de este impacto positivo en la gestión de riesgos, el proyecto contribuyó de manera significativa a la generación de empleo y a la adquisición de bienes y servicios en las comunidades cercanas, fortaleciendo así los lazos y la cooperación con las áreas de influencia del proyecto”, concluyó la gerente.
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