Con una ventaja de 17-11 en el entretiempo, Qatar no dejó lugar a dudas sobre su superioridad en la cancha y conservó la corona continental en su poder desde la versión de 2014.
En el Sheikh Khalifa Sports City Hall, los titulares contaron con el protagonismo goleador de Zarko Markovic, máximo anotador del encuentro con siete, junto a los aportes de Abdulrazza Murad y Allaed Berrached, dueños de cuatro tantos cada uno.
Con este triunfo, Qatar estableció la racha de victorias más larga en la historia de la competición, válido para superar el récord anterior de cinco trofeos logrados por la República de Corea entre 1983 y 1993.
Por los medallistas de plata, Taiga Tsutaya y Shuichi Yoshida sumaron cinco dianas cada uno, para destacar en el regreso de Japón a una final por primera vez desde 2004.
El elenco de Qatar despidió invicto la competición con seis victorias y un empate, este último ante los nipones durante la etapa de la ronda principal.
Por la disputa de la presea de bronce, los anfitriones de Bahréin doblegaron 27-17 a Kuwait, gracias al liderazgo ofensivo de Ali Eid, autor de nueve goles en 13 disparos.
Las cuatro selecciones, Qatar, Japón, Bahréin y Kuwait representarán a Asia en la versión 29 del Campeonato Mundial, programado para Croacia, Dinamarca y Noruega del 14 de enero al 2 de febrero del 2025.
El certamen de Bahréin convocó a las mejores 16 selecciones de la región y el top 10 de la tabla final lo conformaron en orden Corea del Sur, Irán, Emiratos Árabes Unidos, Iraq, Arabia Saudita y China.
Más abajo en el ordenamiento concluyeron China (11), Taipei de China (12), Omán (13), Hong Kong (14), Nueva Zelanda (15) e India (16).
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