Al intervenir en el Diálogo Mundial sobre el Comercio, organizado por la Organización Mundial del comercio (OMC) y la Cumbre de las Naciones Unidas sobre los Sistemas Alimentarios, subrayó la creciente importancia de ese sector en la creación de los sistemas alimentarios necesarios para el siglo XXI.
Explicó que el comercio es necesario para trasladar los alimentos de las regiones con excedentes a las que tienen déficit, en tanto se estima que una de cada seis personas en todo el mundo depende casi por completo de la compra-venta de la comida que consume, una proporción que podría aumentar al 50 por ciento para 2050.
La máxima dirigente de la OMC consideró que de cara al futuro será importante abordar las distorsiones comerciales y garantizar la sostenibilidad de los sistemas alimentarios, para dar forma al uso de la tierra, el agua y la energía.
También, subrayó que esa actividad ayuda a crear empleos y aumentar los ingresos, así como mejor la capacidad de las personas para adquirir alimentos.
Durante su intervención destacó como la moderación general de restricciones comerciales durante las fases agudas de la crisis de la Covid-19 el año pasado, evitó que la crisis sanitaria se convirtiera en una crisis alimentaria.
‘El comercio ha sido una de las soluciones, y no uno de los obstáculos, para la seguridad alimentaria mundial en medio de la pandemia’, argumentó.
Okonjo-Iweala acogió con beneplácito la próxima Cumbre sobre sistemas alimentarios de las Naciones Unidas y su papel en la reafirmación de la necesidad de crear mecanismos aptos y capaces de responder a las preocupaciones del siglo XXI.
Esa cita, convocada por el secretario general de la ONU, António Guterres, se llevará a cabo en septiembre de este año, como parte de la Década de Acción para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) para 2030, en particular, disponer de sistemas alimentarios más saludables, sostenibles y equitativos.
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