Según informó el gobernador de la región de Tozeur, Aymen Béjaoui, esas personas perecieron como consecuencia de la sed en medio de la ola de calor que afecta a este país y a toda la región del Mediterráneo.
Los migrantes provenían de África subsahariana de donde la policía reportó recientemente un incremento del tráfico de personas que por lo general tratan de llegar a Europa.
En este Estado norafricano se registraron temperaturas récord de 50 grados Celsius el miércoles, conforme con datos del servicio meteorológico nacional.
Las autoridades precisaron que los migrantes de la región subsahariana intentan atravesar Argelia y Túnez para llegar a la costa del Mediterráneo y desde allí cruzar a Europa.
Pescadores y personal de las fuerzas navales recogieron decenas de cadáveres de ahogados, así como rescataron a centenares de personas, cuyas embarcaciones naufragaron cuando pretendían cruzar el Mediterráneo con destino a algún país de la Unión Europa.
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