Durante el acto de presentación del documento la víspera, víctimas de la violencia en Senkata y Sacaba clamaron por justicia y derramaron lágrimas por el recuerdo de los 38 muertos de entonces, la mayoría jóvenes, publica el periódico Ahora el Pueblo.
Informe de expertos demostró el golpe de Estado de 2019 en Bolivia
Bajo el título ‘Víctimas satisfechas por las conclusiones del informe’, el diario reseña el impacto entre supervivientes y familiares de heridos y fallecidos, ‘que mostraron su aceptación del informe, aunque no les devuelva a sus seres queridos’.
La reacción positiva ante las recomendaciones del GIEI creció por los compromisos del presidente Luis Arce y otras autoridades de hacer justicia a los autores de esos crímenes señalados en el informe, que también será presentado ante la ONU.
‘Ni olvido ni perdón. Los muertos no se reviven’; ‘No es venganza, es justicia’; ‘No fue fraude, fue golpe’; ‘Memoria, verdad y justicia’; ‘Sacaba y Senkata no se olvidan’, se leía en carteles exhibidos en el acto, describe la publicación.
Por su parte, Gloria Quisbert, presidenta de la Asociación de Víctimas de Senkata, lamentó cómo la expresidenta de facto Jeanine Añez y el exministro de gobierno Arturo Murillo firmaron el Decreto Supremo 4078 para reprimir las movilizaciones.
‘Así como yo, docenas de familias sufrieron la pérdida de sus seres queridos producto de la represión estatal del gobierno de facto’, recordó la activista al intervenir en el acto de presentación del informe final del GIEI-Bolivia.
Quisbert, quien perdió a su hermano por la agresión de efectivos policiales y militares, confirmó que el gobierno de facto de Añez vulneró ‘los derechos de las familias bolivianas, dejando luto y dolor’.
Gregoria Siles, madre del joven de 25 años Omar Calle, recordó entre sollozos cómo a su hijo le dispararon por la espalda en las movilizaciones en el puente de Huayllani-Sacaba, ‘y la bala le destrozó uno de sus pulmones y el corazón’.
Otros familiares de las víctimas narraron los sucesos de los que fueron víctimas durante aquel régimen, agradecieron a los investigadores por su informe y opinaron que la investigación ‘marcará su rumbo en búsqueda de justicia’.
Los medios bolivianos dedican este miércoles amplios espacios al informe del GIEI, entidad que investigó durante ocho meses los actos represivos, mediante entrevistas a 400 personas, el análisis de 120 mil expedientes y testimonios de organizaciones sociales.
El documento confirma que los disparos que resultaron en muertos y heridos se originaron en las Fuerzas Armadas y la Policía, que usaron armas letales en noviembre de 2019, según las
evidencias.
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