Según la agencia de noticias Anadolu, los oficiales refirieron que los indocumentados fueron obligados por autoridades griegas a dirigirse hacia aguas territoriales turcas, donde el bote en el cual viajaban presentó dificultades.
Los extranjeros fueron llevados ante las autoridades migratorias correspondientes.
Por otra parte, la Policía de este país detuvo a otros 39 extranjeros en la norteña provincia de Kirklareli.
Los migrantes provienen de naciones como Iraq, Siria y Afganistán y llegaron a Turquía por vías ilegales, según precisaron las fuerzas del orden.
Diariamente, decenas de personas intentan llegar a la Unión Europea a través de este país euroasiático para huir del hambre, la pobreza y los conflictos.
La ausencia de una política migratoria eficaz y de un acuerdo entre las naciones del bloque y sus vecinos empeora la situación de los extranjeros y provoca constantes conflictos entre los Estados implicados.
msm/gas