El gobierno del socialista Antonio Costa anunció el levantamiento de restricciones para limitar el avance del coronavirus SARS CoV-2, causante de la Covid-19, después que el 85 por ciento de la población recibió vacunas para combatir esa dolencia.
Unos 9,3 millones de votantes están llamados a acudir este domingo a las urnas para renovar 308 ayuntamientos y gobiernos municipales para un mandato de cuatro años, cuando los sondeos indican un posible triunfo de los socialistas.
La llamada izquierda en esa nación europea tiene una marcada representación entre la veintena de formaciones políticas que participan en los comicios, incluido el gobernante Partido Socialista, el Bloco de Esquerda (marxista) y el Partido Comunista Portugués.
De su lado, los más visibles exponentes de la derecha en las elecciones son el Partido Socialdemócrata (PSD, conservador) y el Chega (ultraderecha), destacó la televisión local.
Los sondeos muestran dos tercios de la preferencia popular a favor de los socialistas, mientras que apenas un 15 por ciento lo hace por el PSD.
Entre las plazas más importantes en disputa está la de esta capital, donde el socialista Fernando Medina podría lograr un respaldo del 51 por ciento, casi el doble de su principal rival, el conservador y excomisario europeo Carlos Moadas, señalaron sondeos preliminares.
Además, en Oporto, otra ciudad importante del país, el independiente Rui Moreira podría ser reelegido con más del 60 por cientos de los votos, es decir, nada para la derecha, comentó la prensa local.
Expertos destacaron aquí el auge del movimiento ‘negacionista’, que desconoce los efectos del coronavirus SARS CoV-2, y de los antivacunas, quienes organizan protestas para mañana en varias ciudades, incluida esta capital, para llamar a boicotear el proceso electoral.
Sin embargo, se espera que la demanda de ausentarse a las urnas tenga poco éxito, aunque en 2017 el abstencionismo en las municipales llegó a un 45 por ciento.
ga/to