Para su investigación, publicada en la International Journal of Molecular Sciences, los expertos analizaron seis edulcorantes artificiales de uso común en el mundo: aspartamo, sacarina, sucralosa, acesulfamo de potasio (Ace-K), advantame y neotame.
Aunque ninguno de ellos mata a las bacterias, sí afectan a esos microorganismos, precisó el documento.
Nuestra pesquisa debería impulsar a la industria alimentaria a reevaluar el uso de esos productos, subrayó el profesor Ariel Kushmaro, citado por el diario The Jerusalem Post.
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