Un artículo de opinión suscrito por Christopher Barnard, director de Política Nacional de la American Conservation Coalition (ACC), señala que la nuclear es una fuente de energía segura y fiable que pudiera ayudar a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en un 50 por ciento para 2030.
Sin embargo, afirma que en Estados Unidos dejan que la energía nuclear se extinga lentamente, mientras se cierran mas centrales atómicas que plantas de carbón.
El experto cita el caso de varias centrales nucleares, como Indian Point, a las afueras de Nueva York, que deben cesar sus operaciones para finales de año.
Al calificar de política miope esas acciones, Barnard precisa que la nuclear proporciona más de la mitad de toda la energía limpia en Estados Unidos y, sin embargo, la mitad de ese parque está previsto que se retire para 2030, según el Grupo Rhodium.
Irónicamente, expresa, 2030 es también la fecha límite para el objetivo del presidente Joe Biden de reducir el 50 por ciento de las emisiones, en comparación con los niveles de 2005.
Estos ejemplos no sólo son trágicos para las comunidades locales, que perderán miles de puestos de trabajo y megavatios de energía limpia, sino indicativos de un fracaso político que tendrá graves consecuencias para la capacidad de Estados Unidos de luchar contra el cambio climático, subraya el directivo de ACC.
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