De acuerdo con el estudio, los investigadores lograron capturar imágenes con detalles nunca antes vistos e identificaron un agujero negro ubicado en el centro de Centaurus A, una de las radiogalaxias cercanas a la Tierra.
Encontraron que dicho fenómeno espacial tiene una masa de unos 55 millones de soles, un valor inferior en comparación con el agujero masivo de la galaxia Messier 87, que tiene 6.5 millones de soles.
Aun así, expresa el documento, el pequeño se comporta como los más grandes y según los datos obtenidos el jet o chorro de materia lanzado, es más brillante en los bordes que en el centro, lo mismo que sucede con otros agujeros.
¨Estudiarlo nos permite observar de cerca y directamente cómo nace un chorro monstruosamente gigantesco lanzado por un agujero negro supermasivo’, afirmó Michael Janssen, astrónomo implicado en la investigación.
Los especialistas puntualizan que a diferencia de todas las observaciones realizadas anteriormente a estos tipos de fenómenos, ahora pudieron capturar imágenes de un jet a una frecuencia 10 veces mayor y con una resolución 16 veces más nítida.
Los agujeros negros son restos fríos de antiguas estrellas, tan densas que ninguna partícula material es capaz de escapar a su poderosa fuerza gravitatoria, ni siquiera la luz.
Ellos representan la última fase en la evolución de enormes estrellas que fueron al menos de 10 a 15 veces más grandes que el sol.
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