Hubo, además, considerables daños a propiedades públicas y privadas, informó sin detallar los destrozos Adugna, quien acusó a la organización de incitar a la subversión del orden legislativo y a la violencia étnica.
Shene tiene las mismas intenciones que otros insurgentes, está colaborando con ellos e intensificó los ataques dirigidos contra los civiles en las últimas semanas, subrayó.
El Gobierno regional, dijo, realiza gestiones pertinentes para reintegrar y proteger a todos los desplazados, mientras trabaja para aumentar la seguridad y garantizar la paz.
Oromía, la más extensa de las divisiones administrativas, abriga a la comunidad oromo, el mayor grupo étnico de la nación, alrededor de un tercio de la población etíope.
Facción formada dentro del Frente de Liberación Oromo, aunque presuntamente opera de manera autónoma desde el 2018, Shene es acusada de masacres de civiles, sabotajes y destrucción de propiedades e infraestructuras, entre otros muchos delitos.
Durante una sesión en mayo pasado, la Cámara de Representantes del Pueblo (parlamento) lo designó organización terrorista, como al Frente de Liberación Popular de Tigray, y respaldó así una resolución del Consejo de Ministros.
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