Yo la echaré de menos, el continente la echará de menos y los luxemburgueses también, dijo Bettel en declaraciones a la prensa a su llegada a la cita, posible última reunión del mecanismo comunitario con la presencia de Merkel como líder del ejecutivo germano.
De su lado el recién estrenado canciller austriaco, Alexander Schallenberg, expresó que alguien que permaneció tanto tiempo como dirigente dentro de la UE dejará un ‘hueco tras de sí’.
Antes de las elecciones de septiembre Merkel anunció su retiro de la política, y cifró esperanzas para la continuidad de su legado en Armin Laschet, actual primer ministro del estado de Renania del Norte-Westfalia.
La suerte de su elegido no fue la mejor y vio caer su popularidad rápidamente, pese a encabezar en un principio las encuestas.
Cuestionamientos relativos al enfrentamiento a la pandemia y a las inundaciones que en agosto afectaron su estado, así como desafortunadas declaraciones ante la prensa, menguaron su popularidad.
En ese escenario el candidato opositor Olaf Scholz y su partido socialdemócrata se alzaron con la victoria y ya comenzaron diálogos con los Verdes y Liberales para la formación de un nuevo ejecutivo.
Aunque pocas, los democristinos aún tienen opciones de mantenerse en el poder si logran aliarse con otras fuerzas políticas y alcanzar la mayoría parlamentaria en el Bundestag (Cámara Baja), según prevé la Constitución.
mem/ehl