Las disposiciones autorizarían a los migrantes indocumentados hasta 10 años de autorización de trabajo, de acuerdo con el presidente del Comité Judicial de la Cámara de Representantes, el demócrata Jerrold Nadler.
La última versión del plan económico conocido como Reconstruir Mejor (Build Back Better) no ofrece una vía de acceso a la ciudadanía para los 11 millones de personas sin permiso de residencia que se calcula que ya viven en Estados Unidos.
En su lugar, se basa en un proceso conocido como parole para eximir de los requisitos de inmigración durante cinco años a quienes hayan vivido en el país desde el 2011.
Una vez aprobado el plan, los beneficiarios podrían solicitar una prórroga de cinco años, lo que les permitiría obtener residencia hasta finales de 2031.
Se trata de un intento de apelar al parlamentario del Senado, que en dos ocasiones ha rechazado propuestas de inmigración más amplias, argumentando que no cumplían las normas presupuestarias que permiten que la medida sortee un filibusterismo del Partido Republicano.
Aún queda por verse si los demócratas de la Cámara de Representantes serán capaces de conseguir el apoyo de aquellos que han presionado para que las disposiciones de inmigración sean más fuertes o más débiles.
Según la publicación The Hill, la presidenta de la Cámara, Nancy Pelosi (demócrata de California) disipó cualquier idea de que el lenguaje de la inmigración vaya más allá de lo recién aprobado.
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