Estamos considerando lo que podemos hacer, ya que los crecientes precios de la gasolina y otros productos combustibles están presionando a los hogares y empresas gravemente afectados por la pandemia de Covid-19, dijo Kishida en conferencia de prensa.
Si se decide, será la primera vez que Japón recurra a sus reservas de petróleo para bajar los precios, y los funcionarios del gobierno buscan principalmente utilizar el exceso de existencias en lugar de revisar la ley pertinente.
Sin embargo, hay voces en la propia administración central nipona que advierten contra la liberación de reservas en momentos distintos a la escasez de suministro.
De acuerdo con autoridades, las decisiones pasadas de aprovechar las reservas se tomaron para abordar las preocupaciones de suministro luego de desastres naturales y disturbios políticos en el extranjero.
Según la Ley de Almacenamiento de Petróleo, la liberación se permite solo en tales circunstancias. Funcionarios creen que revisarlo a precios más bajos tomaría tiempo y no sería realista.
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