Ahmed realizó el llamado luego de una reunión con altos oficiales del ejército federal, en la cual establecieron las estrategias militares a seguir en los próximos días durante la ofensiva contra el TPLF (siglas en inglés), según un reporte oficial.
La guerra ha terminado, dijo el premier, quien dirigió su petición principalmente a los jóvenes del Frente y, además, exhortó a las madres del estado de Tigray a preguntar por sus hijos, involucrados por la fuerza en el conflicto armado.
Etiopía, comentó, lucha contra cualquier enemigo que esté saqueando, matando y violando, y tiene el compromiso de eliminar a las fuerzas del grupo terrorista pronto.
La organización ha sido completamente derrotada y es cuestión de poco tiempo concluir con éxito la lucha armada, aseveró.
El ejército ha registrado una notable victoria en el Comando Oriental con un operativo realizado en un día y medio, y lo repetiremos en el frente de Gashena (región de Amhara) y procederemos con otras ofensivas para completar la contienda, explicó.
Si bien reportes oficiales dan cuenta de importantes victorias del ejército federal durante la última semana, fuentes asociadas a las fuerzas tigriñas aseguran que están en pie de lucha y tienen grandes opciones para avanzar hacia la capital de Etiopía.
Desde noviembre de 2020, el ejército federal sostiene una guerra contra el Frente, declarado terrorista por el Parlamento y acusado de violar los derechos humanos y cometer otros delitos en las regiones de Tigray, Afar y Amhara, entre otros estados.
En junio último, las autoridades federales decretaron un armisticio para facilitar las labores agrícolas y la asistencia humanitaria en Tigray, pero el grupo lo desestimó y aumentó sus operaciones, principalmente contra civiles e instituciones públicas.
Los muertos, desplazados y destrozos materiales crecen a diario y, aunque el Gobierno realizó varios llamados como el de este martes, es improbable una solución sin uso de las armas.
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