Según informó un reporte de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio de Estados Unidos (NASA), el mejor momento para apreciarla será después del atardecer cuando estará ubicada cerca de Regulus, la mayor estrella de la constelación de Leo.
El bautizo del fenómeno se le atribuye a las poblaciones nativas de Norteamérica debido a su coincidencia con intensas ventiscas propias de la temporada invernal, acontecida en esa región del mundo.
No obstante, la luna de nieve podría igualmente ser conocida como la de los múltiples nombres pues se le llamó del hambre, huesuda o de la hambruna, ya que su aparición acontecía junto con los períodos de menor caza.
En las comunidades europeas antiguas, se le denominó como la luna del lobo o de las candelas, en asociación con la celebración de origen católico de la Candelaria festejada el 2 de este mes, como símbolo de la consagración del niño Jesús.
En relación a Asia, por ejemplo, coincide con la culminación de los festejos del año nuevo, celebrados el día 15.
Asimismo, acorde con las creencias budistas, esta luna corresponde con el Magha Puja, evento que conmemora la primera concentración de Buda con mil 250 de sus discípulos.
Las características inherentes al satélite natural de la Tierra durante esta época son visibles desde la víspera y lo serán hasta mañana.
Si bien los especialistas advirtieron que la luna llena de febrero será generalmente apreciable en áreas alrededor del mundo que no tienen una densa cobertura de nubes, estará debajo del horizonte en el Polo Sur y, por lo tanto, no se podrá observar desde esa área.
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