Ese proceso debe tomarse como una ocasión de oro para superar los desafíos políticos de la nación, con el objetivo de sentar las bases de nuestro futuro, y necesita del apoyo con entusiasmo y propiedad de todos los etíopes, comentó.
Si simplemente olvidamos y socavamos el hecho de que esta oportunidad se está asegurando como resultado de un inmenso trabajo y una larga historia, podemos desaprovecharla fácilmente, señaló durante una breve alocución trasmitida por televisoras nacionales.
Ahmed pidió confianza en el diálogo nacional, reiteró que no podrá ser inclusivo a “menos que todos lo apoyen activamente y con seriedad” e insistió en la necesidad de realizarlo “para poner el futuro del país en el camino correcto”.
Igualmente, les exigió a los líderes de las organizaciones políticas “participar en las discusiones para que se logren los resultados deseados” y exhortó a los intelectuales a “brindar comentarios constructivos y recomendaciones para contribuir significativamente a este paso histórico”.
Los líderes religiosos y ancianos, añadió, también “deben cumplir con su deber nacional apoyando el proceso de diálogo en este momento en que el país está en proceso de llegar a un acuerdo”.
Después de las elecciones generales, que ganó el Partido de la Prosperidad liderado por Ahmed, el gobierno prometió crear un espacio inclusivo orientado a debatir y lograr consenso acerca de los temas nacionales más importantes.
Así nació la intención de realizar un intercambio nacional y el 10 de diciembre último el Consejo de Ministros suscribió una propuesta para establecer la Comisión de Diálogo, aprobada más tarde por la Cámara de Representantes del Pueblo (Parlamento).
La Comisión fue establecida de manera oficial el pasado 21 de febrero y quedó compuesta por 11 integrantes, responsables de formular múltiples agendas y crear foros para debatir y solucionar asuntos de interés estatal.
oda/raj
