En Afar, dejó fuera de funcionamiento un hospital, 17 centros de salud y 42 puestos, dijo el portavoz de la cancillería, Dina Mufti, en conferencia de prensa.
Y en Amhara, añadió, fue peor: destruyó 82 departamentos gubernamentales de salud, 40 hospitales, 453 clínicas, mil 850 sanatorios o dispensarios, cuatro bancos de sangre y una planta de oxígeno.
Luego del ataque del TPLF (por sus siglas en inglés) al Ejército federal, en noviembre de 2020 comenzó una conflagración armada entre ambos en el norte etíope.
A mediados de 2021 el Gobierno decretó un alto el fuego, pero la organización tigriña la rechazó y extendió su beligerancia a Afar y Amhara.
Según informes oficiales, además de asestar golpes a las infraestructuras económicas y sociales, causó el desplazamiento de un millón 800 mil personas y hundió en la inseguridad alimentaria a ocho millones 300 mil ciudadanos aproximadamente.
En la comparecencia, además, Mufti reseñó el reciente encuentro en esta capital entre el viceprimer ministro etíope, Demeke Mekonnen; y el comisionado de Asuntos Políticos, Paz y Seguridad de la Unión Africana (UA), Bankole Adeoye.
Mekonnen, comentó, “señaló varias de las iniciativas constructivas que el gobierno viene realizando los últimos meses, en demostración de su compromiso para garantizar estabilidad y paz duradera en el país”.
La excarcelación de figuras políticas de alto perfil, el levantamiento del estado de emergencia antes de su debido tiempo y la promoción de un diálogo nacional inclusivo, apuntó, fueron algunas de las medidas debatidas con el funcionario de la UA.
El vocero, por otra parte, manifestó que Etiopía, recién elegida a la junta ejecutiva del Programa Mundial de Alimentos, “espera contribuir a la asistencia humanitaria en África y el resto de los continentes”.
Asimismo, expresó que “la cancillería emitió un comunicado de apoyo a la declaración de la embajada de Rusia en Addis Abeba refutando los informes infundados del reclutamiento de etíopes para las Fuerzas Armadas” de ese país.
Señaló, igualmente, que “marcha bien el proceso de repatriación de migrantes desde Arabia Saudita”, iniciado el 30 de marzo pasado, y “más de 10 mil 700 retornados hasta ahora reciben asistencia humanitaria y orientación para reinsertarse en sus comunidades”.
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