Según ABC, el proyecto expuesto por el diputado cartista Raúl Torres establece dos fases en la etapa de intercepción: una de advertencia verbal y otra que se refiere al uso de disparo de advertencia como medida de señal, utilizando municiones que contengan cartuchos.
De esa manera, la armada aérea nacional queda imposibilitada de derribar a los aviones no identificados, especialmente los que se dedican a las faenas del narcotráfico.
Por su parte, el diputado Jorge Ávalos Mariño, del Partido Liberal Radical Auténtico, se opuso a la decisión y explicó que la Fuerza Aérea pierde la facultad sustancial para combatir a las aeronaves ilícitas.
El crecimiento de narcotráfico en Paraguay es un fenómeno extremadamente preocupante, coinciden expertos, al extremo que en los últimos meses el presidente de la nación, Mario Abdo Benítez, destituyó a varios altos ejecutivos de su gabinete, incluido el ministro del Interior, Arnaldo Giuzzio, por presuntos vínculos con el traficante brasileño Marcus Vinicius Espíndola.
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