El Ministerio de Economía, Comercio e Industria recomendó a las personas que usen más ropa en el interior de sus casas, ajusten los aires acondicionados a temperaturas más bajas y apaguen las luces innecesarias, consejos similares a los dirigidos al sector de oficinas.
El titular de la cartera, Yasutoshi Nishimura, dijo en conferencia de prensa que necesitaban actuar para garantizar que el suministro eléctrico estable no se interrumpiera entre el 1 de diciembre próximo y el 30 de marzo de 2023, cuando aumenta la demanda frente a las bajas temperaturas.
A propósito, mencionó que reactivarán las centrales eléctricas ociosas y compararán combustible adicional, entre otras medidas.
Nishimura también reiteró la voluntad oficial de acelerar los esfuerzos para reiniciar los reactores nucleares paralizados desde 2011 que cumplan con los estándares de seguridad.
Este llamado al ahorro durante el invierno es el primero en los últimos siete años, el cual destaca como acción preventiva, pues según los cálculos del gobierno, la tasa de reserva nacional supera el tres por ciento requerido para garantizar suficiente energía a los consumidores, incluso si algún evento meteorológico o fallo técnico afectara las plantas generadoras.
La relación oferta demanda se verá más comprometida en las áreas atendidas por las compañías eléctricas de Tokio y Tohoku, al este y noreste de Japón.
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