Bajo ese precepto, es muy importante el reciente acuerdo del gobierno con el Frente de Liberación Popular de Tigray para restablecer el orden constitucional y la estabilidad en áreas del norte, manifestó ante la Cámara de Representantes del Pueblo (Parlamento).
Resulta imposible, señaló, “lograr los objetivos de desarrollo de la nación, mientras permanecemos en el círculo vicioso de la guerra”.
Únicamente los belicistas están descontentos con el programa pacificador iniciado luego del diálogo en Pretoria (Sudáfrica) bajo auspicio de la Unión Africana. Los amantes de la paz somos mayoría y queremos ver pronto los mejores frutos de la negociación, comentó.
Del mismo modo, exhortó a los ciudadanos “a trabajar duro para lograr el fructífero término del proceso, con el objetivo de que contribuya a garantizar respeto para todas las diferencias y lograr un equilibrio viable”.
Priorizaremos la rehabilitación de los servicios en áreas afectadas y la devolución a sus hogares de los desplazados por el conflicto, pero los etíopes también deben tener un desempeño ejemplar para restituir la normalidad en la región de Tigray, subrayó.
También instó a respaldar el proceso de diálogo inclusivo en curso para lograr consenso respecto a los principales asuntos de interés nacional, de acuerdo con la notificación de la Dirección de Comunicación de la Cámara.
Ahmed compareció este martes en la cuarta sesión ordinaria del órgano legislativo y, tras referirse al acuerdo de paz y realizar una reseña de su gestión, trató otros asuntos domésticos.
Según el comunicado, respondió a preguntas de los parlamentarios respecto al discurso de la presidenta Sahle-Work Zewde el 10 de octubre último y expuso el criterio gubernamental acerca de varias cuestiones, incluidas el costo de vida y el desarrollo agrícola.
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