Las autoridades japonesas convierten el país en un escenario de coreanofobia con críticas a las medidas consideradas de defensa por Pyongyang ante el incremento de los ejercicios militares contra la RPDC, ejecutados por Estados Unidos, República de Corea y el propio Japón, según la ACNC.
Debido a ese panorama se reportaron más de 10 casos de acoso contra escuelas coreanas y sus alumnos, y sedes de la Asociación General de Coreanos Residentes en Japón (Chongryon), cuyos derechos humanos fueron violados de manera flagrante, indicó el medio noticioso.
Este refirió que el 4 de octubre pasado centros educativos en Tokio y Kobe recibieron llamadas con mensajes amenazantes como “no se puede permitir la presencia de las escuelas norcoreanas en Japón» y «destruiremos los establecimientos de los coreanos una vez ordenada la ley en Japón».
Además, en los alrededores de las sedes de la Chongryon en los departamentos Aichi, Ishikawa y Gunma se vociferaron con altoparlantes frases como «¡Fuera los norcoreanos!», indicó la ACNC.
De esa manera Japón intenta inculcar en sus ciudadanos el sentimiento de hostilidad contra los coreanos y así preparar el ambiente favorable para materializar su objetivo de invadir la RPDC, reiteró la agencia de noticias.
Al respecto, exhortó a Tokio a actuar con prudencia.
Pyongyang advirtió una vez más que no perdonará la violencia fascista contra la Chongryon, que representa la dignidad y soberanía de Corea Democrática, de los coreanos residentes en Japón y sus hijos.
jf/lrd