El acto se efectuó en el lugar donde el Maestro y el Generalísimo Máximo Gómez rubricaron El Manifiesto de Montecristi, y contó con la presencia de miembros de la embajada de Cuba en Dominicana, encabezados por la Cónsul Enith Pérez, autoridades de la ciudad y la provincia, integrantes de la Campaña Dominicana de Solidaridad y estudiantes.
En el homenaje, cargado de patriotismo, hubo varios oradores que resaltaron la figura del Apóstol cubano y el significado del Manifiesto; se le recordó con canciones y poemas y finalmente fue depositada una Ofrenda Floral delante de su busto y el de Gómez.
Como colofón a la actividad intervino la Cónsul, quien resaltó la importancia que tiene para su país la fecha y el poder conmemorarla en este histórico lugar.
Destacó los aportes del Héroe Nacional a la consolidación y fundamento de la nación, su ideario y consecuente accionar definitivamente incorporados a la conciencia cubana como también lo está la impronta y obra revolucionaria del líder histórico de la Revolución, Fidel Castro.
También evocó el orgullo que sienten los cubanos sabiéndose portadores primarios de la trascendental herencia martiana y dijo: «Martí no es una frase, Martí convoca y une, Martí es un ejemplo de actuación consecuente, tengámoslo día a día presente como fuente de inspiración.
Reafirmemos nuestro compromiso profundo con la vida, con la patria y con la humanidad y entreguemos lo mejor de nuestro ser y así estaremos honrando a Martí por siempre, concluyó.
Una vez terminado el acto, varios de los presentes acompañaron a los diplomáticos cubanos hasta el Liceo Secundario José Martí de esta ciudad, donde compartieron con los estudiantes y profesores y llevaron a cabo una donación de libros.
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