El comisionado Yonas Adaye, de la Comisión de Diálogo Nacional, expresó que los valores, normas y creencias practicados son vitales para ese proceso que se llevará a cabo desde la base hasta el nivel más alto y abarcará a padres religiosos, ancianos y líderes comunitarios.
“Somos ricos en normas tradicionales de resolución de conflictos y emplearemos esa experiencia en nuestra misión”, enfatizó.
Adaye recordó que para lograr la misión de la comisión y registrar el desarrollo sostenible y la paz, no es obligatorio salir al extranjero, sino utilizar los mecanismos locales de resolución de conflictos y el conocimiento en los próximos años.
Recalcó que los valores sociales presentes en diferentes partes del país son vitales para el entendimiento mutuo y utilizarán todos los métodos de resolución y prevención de conflictos en el Diálogo Nacional.
“Podemos aplicar experiencias internacionales que se ajusten mejor a nuestro contexto. Aún así, los mecanismos y normas indígenas de resolución de conflictos tendrán un papel indispensable en nuestras actividades en los años venideros”, subrayó.
Consideró que la participación activa de las personas a nivel de base es un enfoque más viable para buscar soluciones duraderas a los problemas profundamente arraigados de Etiopía que la negociación de élite. Sin duda servirán para superar los desafíos existentes y emergentes, concluyó el comisionado.
Reconciliación, compensación a las víctimas, justicia y otros temas serán incluidos en la agenda de ese proceso que traerá soluciones duraderas a problemas de larga data, como parte de la implementación del Acuerdo de Paz de Pretoria que puso fin al conflicto entre el gobierno y el Frente de Liberación Popular de Tigray en noviembre pasado.
El objetivo final es construir un consenso en el país y reforzar una cultura de confianza como lo establece la legislación. De igual modo, buscará aliviar la diferencia y el malentendido entre varios sectores de la sociedad.
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