Peña admitió que el penal está superado en su capacidad, por ello, la decisión es cerrar las puertas para nuevos internos.
Para aliviar un poco la situación, el mandatario pidió a la ministra de Obras Públicas, Claudia Centurión, verificar las nuevas cárceles que se construyen en Emboscada y Minga Guazú, para que estén operativas lo antes posible.
Sin embargo, este sábado, el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones informó que las nuevas penitenciarías aún no pueden entrar en funcionamiento por falta de seguridad, pues las rejas pueden abrirse hasta con una tarjeta.
Centurión aseguró que las obras también requieren mejoras en cuanto a los trabajos en la parte civil y en el equipamiento que realiza la Itaipú Binacional.
Las construcciones deben incluir ocho bloques en total, con siete sectores para celdas comunes y un pabellón de máxima seguridad; además de talleres y aulas, un sector deportivo, comedor, entre otras instalaciones.
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