Otro dominicano en el grupo permanece bajo custodia y enfrenta un proceso federal en el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos en Puerto Rico por un cargo de intento de reingreso ilegal a jurisdicción estadounidense.
La Guardia Costera, junto con su Grupo de Trabajo de Seguridad Nacional, mantiene una presencia continua con activos aéreos, terrestres y marítimos en el Estrecho de Florida, el Pasaje de Barlovento, el Pasaje de Mona y el mar Caribe.
El enfoque combinado de múltiples niveles está diseñado para proteger la seguridad de la vida en el mar y al mismo tiempo prevenir la entrada marítima ilegal a Estados Unidos y sus territorios.
Durante la interdicción, agentes de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos informaron haber visto un viaje migratorio irregular frente a la costa de Aguadilla en la madrugada del domingo.
Una unidad marítima de las Fuerzas Conjuntas de Acción Rápida de la Policía de Puerto Rico interceptó la embarcación sospechosa cuando los guardacostas Donald Horsley y Heriberto Hernández llegaron a la escena.
Luego de la interdicción, la tripulación del cúter Heriberto Hernández embarcó a 15 ciudadanos dominicanos, 14 hombres y una mujer, y los transportó a aguas territoriales de la República Dominicana, donde fueron trasladados a un buque de la Armada de esa nación para su repatriación.
El migrante restante fue trasladado a Mayagüez, en Puerto Rico, donde agentes del Sector Ramey de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos lo recibieron en custodia.
“La fuerte colaboración y determinación entre las agencias asociadas del Grupo Interagencial de la Frontera del Caribe continúa brindando resultados exitosos como los logrados en este caso”, dijo el capitán José E. Díaz, comandante del Sector San Juan de la Guardia Costera de los Estados Unidos.
El oficial advirtió a cualquiera que esté pensando en participar en un viaje de migración irregular, no hacerse a la mar, pues “su vida estará en peligro ya que estos buques no son aptos para navegar, son muy inestables y tienen poco o ningún equipo de salvamento”.
Además, cualquier persona que llegue ilegalmente será repatriada a su país de origen o de salida y puede ser declarada no elegible para opciones de permiso de inmigración legal.
Desde el 1 de octubre de 2022 hasta el 30 de septiembre de 2023, la Guardia Costera ha llevado a cabo 67 interdicciones de viajes de migración marítima irregular ilegal en el Pasaje de Mona y aguas cercanas a Puerto Rico.
Interdictos durante este período son dos mil 161 ciudadanos no estadounidenses, incluidos mil 871 dominicanos, 264 haitianos, 15 venezolanos, siete kazajos, un albanés, dos colombianos y otro de nacionalidad desconocida.
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