Es alentador el respaldo de gran parte de la diáspora, condenando las tergiversaciones de la situación en el estado regional de Tigray que difunden algunos medios de comunicación, declaró el portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores, Dina Mufti.
Con verdadero sentido de pertenencia, dijo, apoyaron en muchas plazas del mundo los intereses de su país de origen y rechazaron la intromisión de otros estados u organizaciones en cuestiones propias de nuestro pueblo.
Las últimas semanas, las autoridades etíopes señalaron que países y organismos internacionales cuestionan sus procedimientos para resolver la crisis en la septentrional zona, basándose en información falsa difundida por el Frente de Liberación Popular de Tigray (TPLF, siglas en inglés).
Intentan injustamente interferir en los asuntos internos de Etiopía y ejercer una presión mediática internacional innecesaria, desde una postura de alianza con la junta del TPLF, señaló Mufti en una conferencia de prensa.
Según reseñó, los manifestantes en varias ciudades del mundo instaron a la comunidad internacional, en particular a Naciones Unidas, Unión Europea y Estados Unidos a no actuar a partir de reportes difundidos por integrantes o simpatizantes del Frente.
También, explicó, exhortaron a los gobiernos y entidades humanitarias y de derechos humanos a realizar los esfuerzos necesarios para comprender la realidad etíope y detener las presiones contra el gobierno.
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