En un artículo publicado en The Hill, el experto explicó que esta situación amenaza especialmente a las familias más pobres.
El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) estima que alrededor del 10 por ciento de la población del país padece inseguridad alimentaria.
Esta se define como los hogares que obtienen suficientes alimentos para no alterar sus patrones de alimentación, deciden comer dietas menos variadas, utilizan programas federales de asistencia alimentaria y obtienen alimentos de las despensas comunitarias, explicó Ali.
En el 2020, comentó, el USDA estimó que la inseguridad alimentaria de los hogares afectaba a cerca del 15 por ciento de los hogares para niños sin amparo familiar, es decir, que alberga a unos seis millones de menores.
Una encuesta de Gallup encontró que la mayoría de los estadounidenses esperan que la inflación se mantenga durante los próximos seis meses, con el 79 por ciento prediciendo que continuará en ascenso.
La tasa actual de inflación en Estados Unidos alcanza el siete por ciento, un aumento que no se había visto en casi cuatro décadas. No está del todo claro cuándo empezarán a bajar los precios.
Según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación en un informe publicado el jueves, los precios de ciertos alimentos alcanzaron en enero su nivel más alto desde 2011, como la carne, los productos lácteos y los cereales.
Mientras, los aceites alcanzaron su nivel más alto desde que la organización comenzó a seguir los precios de los alimentos, en 1990.
Las razones que explican el aumento de los precios varían desde las persistentes condiciones de sequía en Argentina y Brasil, el aumento de los precios del crudo, los retrasos en el transporte debidos al Covid-19 y la escasez de mano de obra.
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