El documento precisa que solo en las últimas 72 horas se bloqueó el acceso a territorio húngaro de 589 personas, y en la última semana 21 fueron detenidas bajo sospecha de tráfico humano.
Desde fines de 2021 las fuerzas de seguridad de Hungría ampliaron una barrera con alambre de púas a lo largo de sus fronteras con Serbia y Croacia, para tratar de frenar el cruce ilegal por esas zonas, donde se estableció el estado de emergencia.
El primer ministro, Viktor Orbán, ofreció en noviembre del pasado año crear un corredor para que los migrantes transiten hacia otros países europeos, a la vez que reiteró su oposición a recibirlos.
Orbán señaló que por ese corredor los migrantes podrían llegar a Austria, Alemania o Suecia, si esos países aceptan recibir a los mismos.
El mandatario manifestó el interés de Budapest de que la Unión Europea (UE) financie la ampliación de los muros en su frontera, y se mostró confiado en conseguirlo.
Sin embargo, la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen, descartó categóricamente que la UE destine dinero a levantar vallas contra la migración.
De acuerdo con estimados oficiales, en 2020 intentaron atravesar Hungría unas 28 mil personas, pero en 2021 la cifra se elevó a casi 100 mil migrantes.
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