En anuncios de campaña de cara a las elecciones legislativas de mitad de periodo, previstas para noviembre venidero, los miembros del partido rojo transmitieron 93 anuncios de televisión diferentes y en todos mencionaron la inflación como principal crítica a sus opositores, indicó la cadena CNN.
Con mensajes como «La inflación nos está matando. Detengan los gastos imprudentes» o «Inflación récord, impuesto oculto para la clase trabajadora», el partido opositor culpa a Biden por el alto costo de la vida en el país, donde los precios alcanzan su nivel más alto desde 1982.
En comparación, sus contrapartes demócratas, que actualmente controlan la Casa Blanca y ambas cámaras del Congreso, solamente mencionaron el fenómeno inflacionario en dos de sus mensajes publicitarios.
Dentro de la fuerza política identificada con el color azul ese tema genera tensiones internas, en particular por el valor de la gasolina, disparado después de la prohibición de las importaciones de petróleo ruso como sanción a Moscú por su operación militar en Ucrania, según refirió el diario The Hill.
A los demócratas más progresistas les preocupa que eso genere más desigualdad y, aunque apoyan las restricciones contra Rusia, llaman a la administración a tomar medidas para que los estadounidenses no salgan perjudicados.
Sin embargo, señaló el diario, el grupo más liberal manifiesta que las empresas petroleras nacionales están en un momento de auge, aún cuando los clientes se ven afectados.
Biden, que sabe cuánto la inflación puede influir en los comicios de noviembre, llamó a las empresas del sector energético a subir los precios solo en la medida justa y dijo que si el barril baja su costo también debería hacerlo el galón en la bomba de gasolina.
Por su parte, activistas contra el cambio climático acusan a las compañías petroleras de usar la guerra en Ucrania para aumentar las ganancias y aprovecharse de los consumidores promedio, todo a expensas del medio ambiente.
Aunque el equipo de Biden insiste en culpar a Rusia por los altos valores de los combustibles, lo cierto es que la inflación en general comenzó mucho antes de la guerra, influida por la crisis económica derivada de la pandemia de Covid-19 y los problemas en la cadena de suministros, y ahora el gobierno no sabe cómo abordar el problema.
El ocupante del Despacho Oval advirtió que días difíciles se avecinan, pero en realidad poco o nada hace para evitarlo mientras sufre presiones de diversos bandos.
Unos quieren más sanciones a Rusia independientemente de las consecuencias políticas internas, otros aprovechar el momento para transitar a un cambio hacia matriz energética sostenible y otros simplemente que bajen los precios.
Mientras tanto, los republicanos aprovechan para criticar a sus adversarios en medio de una opinión pública dividida, con un 39 por ciento que desaprueba el manejo de Biden del conflicto ucraniano, según una nueva encuesta del Pew Research Center.
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