Desde horas muy tempranas se abrieron las mesas de votación para cumplir con un deber con el cual los cubanos en el exterior reafirman su patriotismo y el deseo de que el país avance por los senderos tradicionales de unidad familiar de forma organizada.
En declaraciones a Prensa Latina, el embajador Marcos Rodríguez señaló que se trató de una jornada de profundo compromiso de parte de nuestros diplomáticos, de nuestros colaboradores médicos y de todos los cubanos que aquí laboramos en las más diversas esferas.
Fue una jornada de compromiso con la revolución, con nuestro pueblo, con nuestras familias y con todos aquellos que queremos un desarrollo mejor de nuestra sociedad, sin discriminación, cada vez más inclusiva y donde todos los cubanos nos veamos reflejados, expresó.
El código de las familias, sobre el que hoy nos pronunciamos, es un instrumento de unión y será un reflejo de muchos anhelos de nuestro pueblo. Aqui, desde México decimos sí al código de las familias, concluyó.
Acciones similares a la de la capital se repitieron en los estados donde trabajan cubanos, principalmente los contingentes de médicos especialistas recién llegados al país ubicados en Nayarit, Tlaxcala, Oaxaca y otros lugares, para contribuir con los programas de México de salud para todos.
Como en toda Cuba, en México los niños pioneros también fueron protagonistas de esta votación al custodiar las urnas en las que fueron depositadas las boletas.
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