Al menos dos mil 212 personas fueron agredidas o atacadas sexualmente, de septiembre de 2021 a enero pasado en áreas de Afar y Amhara, estados del norte etíope, según un borrador de los resultados de la investigación del Comité.
De acuerdo con el informe, varias jurisdicciones fueron afectadas por esos y otros actos violatorios de los derechos humanos perpetrados por el TPLF (siglas en inglés) y el grupo Shene, una facción formada dentro del Frente de Liberación Oromo.
Ambas organizaciones, declaradas terroristas por la Cámara de Representantes del Pueblo (parlamento), consumaron numerosas infracciones que contravienen el derecho internacional y son consideradas crímenes de guerra, afirma el reporte, al cual accedieron la empresa de comunicación Fana Broadcasting Corporate y la Agencia de Noticias Etíope.
Señala, asimismo, que mataron a tres mil 598 ciudadanos al margen de la ley, ejecuciones de las cuales fueron víctimas niños, adultos, ancianos e incluso personas con discapacidades físicas y mentales, además de ocasionarles heridas a mil 315 y afectar la dignidad de unos 452.
Igualmente, saquearon y quemaron propiedades privadas y públicas, profanaron iglesias y mezquitas, golpearon a sacerdotes, robaron donaciones y quemaron ejemplares del Sagrado Corán y de la Biblia.
Existen pruebas contundentes de que los asesinatos se cometieron como parte de un ataque generalizado y sistemático contra la población civil con conocimiento y, por lo tanto, los incidentes de violaciones documentados constituyen crímenes de lesa humanidad, subraya el texto.
También indica que el Comité investigó los hechos en Afar y Amhara durante el período referido, pero no realizó una indagación similar en Tigray, porque todavía es difícil el acceso a este territorio, donde estalló el enfrentamiento armado entre el Frente y el ejército federal en noviembre de 2020.
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