El informe de la Fuerza Aérea nigeriana detalla que los bombardeos ocurrieron la víspera en el estado de Zamfara, aunque un informe separado alude a una acción similar el martes pasado de la cual aún no existen precisiones oficiales.
Grupos de hombres armados que se trasladan en motocicletas atacan aldeas desprotegidas, destruyen cultivos, saquean las provisiones, secuestran personas para exigir rescate en metálico y roban ganado, fijaron en los últimos años sus cuarteles en los estados de Zamfara, Katsina, Kaduna y Níger.
Aunque sus delitos son de derecho común, son vistos con buenos ojos por el grupo islamista Boko Haram, cuyo cuartel general radica en el estado nororiental de Borno, pues sus actividades obligan a las autoridades centrales a dividir sus fuerzas con la consiguiente disminución de las presiones.
El surgimiento de esas pandillas se sumó a otros conflictos internos, políticos, sociales y económicos que lastran a la sociedad nigeriana.
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