Durante 11 meses de pandemia aproximadamente, los pacientes que necesitaron cuidados intensivos no superaron la cifra de 200 en una jornada, pero ese indicador cambió de lunes a jueves último, cuando sobrepasaron los 300 cada vez, con un ritmo ascendente.
Ello plantea un desafío mayúsculo para los esfuerzos gubernamentales por controlar la propagación del SARS-CoV-2, y sobre todo lastra la efectividad lograda por los tratamientos empleados, a la espera de la masificación de una vacuna. Aceptar en dos días 615 personas con sus vidas en peligro supera la capacidad de la Unidad de Cuidados Intensivos y complica el trabajo asistencial, ya comenzamos a gestionar ayudas para responder a esta situación, reconoció el ministerio de Salud.
La cantidad de infectados graves es consecuencia del crecimiento de la tasa de positividad durante esta semana (diagnosticaron 771.75 diarios como promedio en las últimas cuatro fechas) y, también, causa del aumento de las víctimas mortales (55), según datos oficiales.
De acuerdo con el doctor Tegene Regassa, director de Comunicación del Ministerio, la actitud negligente de la población, más las limitaciones para hacer cumplir estrictamente las restricciones adoptadas, están entre los factores ‘que han llevado al país a este escenario’.
Sin embargo, en redes sociales circulan críticas a la decisión del primer ministro, Abiy Ahmed, de eliminar prohibiciones al transporte público y permitir, aunque con medidas rigurosas, la actividad presencial en el sistema escolar, sectores considerados grandes fuentes de contagio.
Lo innegable es que, respecto a la Covid-19, el estado epidemiológico de la nación de África Oriental empeora, pese a llamados del propio Ahmed y la presidenta, Sahle-Work Zewde, o a las diferentes estrategias y campañas aplicadas desde marzo pasado.
Por ejemplo, de las 10 mil 165 pruebas realizadas martes y miércoles, mil 398 fueron positivas, aproximadamente el 14 por ciento, un valor muy alto para Etiopía e incluso grande, comparado con otros países, comentó Regassa en conferencia de prensa.
Con 60 laboratorios dedicados a detectar el síndrome respiratorio distribuidos en su territorio, la nación acumula hasta ahora dos millones 69 mil 997 pruebas, de las cuales resultaron positivas 150 mil 179, la sexta cantidad más alta entre países africanos.
Desde el 13 de marzo de 2020, cuando fue reportado el primer caso detectado aquí, tiene registrados dos mil 249 fallecidos y 130 mil 399 recuperados. Actualmente, además, 17 mil 529 infectados reciben tratamiento médico, contados 348 en estado grave.
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