Desde el acondicionamiento de los colegios electorales, que pueden ser los Consultorios Médicos de la Familia, las escuelas o los círculos infantiles, entre otros locales de la comunidad, hasta la colocación de la propaganda correspondiente al acontecimiento, marcan estos ajetreos.
Los niños suelen ser de los más activos en la distribución de las citaciones que los Comités de Defensa de la Revolución envían a sus miembros para recordarles esta cita con la Patria, que va cobrando vitalidad en la medida en que se aproxima la fecha.
Esa grey menuda se empina también para asumir el domingo la custodia de las urnas de votación, un hecho inédito en otras naciones, donde ese cuidado y vigilancia corre a cargo de los uniformados.
Ese día, además, los vecinos se encargarán de sacar a los balcones, portales y otros sitios visibles, las banderas alegóricas, principalmente la nacional y la roji-negra del 26 de julio, con más pertinencia porque en tan solo cuatro meses se cumplirán los 70 años del asalto al Cuartel Moncada.
En estas jornadas previas se alistan los documentos necesarios y se ponen a punto las urnas y otros medios que se utilizarán, incluidos los correspondientes a los radioaficionados que una vez más garantizarán la información en el territorio más montañoso del país.
Durante los procesos eleccionarios para las nueve legislaturas anteriores del máximo órgano de Gobierno en Cuba se han generado expectativas de mejoramiento de la sociedad cubana porque todos han ocurrido en medio de dificultades materiales de diversa índole.
En esta ocasión resulta particularmente compleja la coyuntura económica y social, cuando son muchas y muy duras las carencias en los abastecimientos, que se sienten con fuerza en unos cuantos rubros de la vida de los cubanos, dígase el transporte, los medicamentos y la alimentación.
Los recorridos de los candidatos a diputados por muchos rincones de la geografía nacional han contribuido a esclarecer inquietudes y quejas, a conocer más de primera mano todo lo que está en juego en esas marcas que dejarán escrito en las boletas la decisión de seguir optando por el Socialismo.
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