En Niza, una ciudad de la paradisíaca Costa Azul, el aeropuerto anuncia la salida a las 16:00, hora local, de un vuelo con “destinación la tercera estrella”, un viaje que millones en suelo galo desean lógicamente realizar.
A esa hora, en el estadio Lusail será el pitazo inicial del duelo en el que también la albiceleste peleará por la tercera corona de su historia, en un choque que enfrentará a las superestrellas del PSG Kylian Mbappé y Lionel Messi, ambos –por si fuese poco- líderes goleadores de Qatar-2022 con cinco.
Para no quedarse atrás, la explotadora del metro de París, la RATP, decidió rebautizar este domingo la estación Argentina de la línea 1, donde puede leerse ahora “Argentine-France, Allez les Bleus”.
El ambiente en Francia es de optimismo y confianza en la tropa dirigida por Didier Deschamps, aunque en realidad se trata de un partido parejo, y de paso un encuentro revancha, ya que en su camino al título en Rusia-2018, los galos mandaron a casa 4-3 a los argentinos en octavos de final.
Miles de franceses viajaron a Qatar, sin embargo, se espera que sean una clara minoría en Lusail, al parecer tomada por asalto por los seguidores de la albiceleste.
El presidente Emmanuel Macron estará en el estadio, acompañado de una delegación que incluye a futbolistas que se perdieron el mundial por lesión, como los estelares volantes y campeones hace cuatro años Paul Pogba y N’Golo Kanté.
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