En declaraciones a Prensa Latina, el presidente de la Federación Cubana de ese deporte, Bárbaro Oliva, agradeció a este país, en particular a la comuna de San Miguel, y a todos los que apoyaron para que los atletas pudieran venir a prepararse aquí con las condiciones creadas.
Explicó que el equipo cubano está clasificado en todas las modalidades y manifestó su seguridad de que los seis jugadores van a poner la enseña nacional en alto y defenderán sus colores con mucho amor y entrega.
La selección entrará a la Villa Panamericana el 24 de octubre y el 29 comienzan las competencias.
El también comisionado nacional de tenis de mesa explicó que la cita continental dará un cupo en doble mixto para las Olimpiadas de París 2024.
El capitán del equipo, Andy Pereira, recientemente campeón individual en los Juegos Centroamericanos y del Caribe y medallista en dos Panamericanos, destacó la importancia de participar en un evento de esta magnitud.
Ver el sacrificio que uno hace todos estos años coronado con una medalla da una gran satisfacción y, aunque no se logre, ya competir a este nivel también es meritorio, afirmó.
Mientras, Daniela Fonseca, participante en Tokio 2020 y ganadora del bronce en el campeonato panamericano de ese deporte celebrado en La Habana, dijo estar contenta de volver a Chile, país donde obtuvo su primera medalla en un evento continental de tenis de mesa.
El equipo cubano mantuvo un encuentro este domingo con el club deportivo del barrio de La Legua, de la comuna de San Joaquín.
Ricardo Soto, entrenador del grupo y metodólogo del Instituto Nacional del Deporte, agradeció la gentileza de la federación cubana y de los atletas para realizar este tope.
Al dar la bienvenida a la selección del país caribeño, Pedro Bronzic, del movimiento de solidaridad con Cuba, destacó los históricos lazos de amistad que unen a los dos pueblos y agradeció a los visitantes permitir a jóvenes chilenos la oportunidad de compartir con un equipo de alto rendimiento.
jcm/car
