Aunque de alguna manera se esperaba, por su condición de doble titular olímpico y cinco veces mundial, había que concretarla sobre el encerado.
De hecho, su compatriota Lázaro Álvarez iba también por esa hazaña, pero fue eliminado tempranamente en la división de 63.5 kilogramos.
En el caso de La Cruz, se convirtió en el primer púgil en conquistar cuatro cetros en la historia de los Juegos Panamericanos, para romper el abrazo a tres coronas que tenía con ootros cuatro compatriotas, incluido el mencionado Álvarez.
No fue fácil, pues el abanderado de la delegación cubana en Santiago 2023 sacó el extra de los grandes en el tercer round del combate final de los 92 kilogramos ante el brasileño Keno Marley Machado.
Como delegación, Cuba, que mandó tradicionalmente en esta disciplina, quedó en tercer lugar, con dos títulos, un subtítulo y una medalla de bronce.
La otra dorada de la mayor de las Antillas la conquistó Arlen López en 80 kilogramos, y con eso se unió a sus compatriotas Orestes Solano, Julio González, Rolando Garbey y Lázaro Álvarez, los otros en la historia panamericana con tres oros.
Al frente del medallero se ubicó Brasil, por primera vez en la historia del pugilismo en estas justas continentales, con cuatro metales dorados, cinco plateados y tres bronceados, por delante de Estados Unidos (2-1-2) y Cuba.
El gigante suramericano cimentó su reinado sobre todo en el sector femenino, donde consiguió cuatro coronas y se ubicó en el podio en las seis divisiones en competencia.
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