El público en el Gimnasio José Joaquín “Papa” Carrillo del Parque Miranda disfrutó la víspera con cada actuación de los kenpistas locales que conquistaron todas las preseas doradas en las cinco modalidades de competencias.
Se compitió en las ramas femenina y masculina en figuras manos libre, defensa personal, figura con arma, combate entre mujeres en los 52 kilos, de 53 a 57, de 58 a 62 y más de 63, mientras los hombres lo hicieron en 60 kgs, de 61 a 67, de 68 a 75, de 76 a 84 y más de 85.
Los venezolanos tan solo tuvieron de oponentes a representantes de Nicaragua quienes echaron en sus forjas nueve medallas de plata y seis de bronce.
La local Gabriela Fernández ganó el primer oro en la categoría defensa personal en la fructífera cosecha dorada de los anfitriones en el único día programado para este deporte.
El kenpo es una combinación de antiguas técnicas de arte marcial chino y principios científicos modernos desarrollada en Japón; consiste en un flujo de movimientos sin fin, una fuerza que puede aplastar a cualquier atacante, según lo describen sus conocedores.
Una de las ramas más extendidas del Kenpo ubica su origen en el siglo XIII, cuando un monje de Shaolin llegó a Japón y enseña su arte a un religioso Shinto; éste lo combina con sus conocimientos marciales y crea el Kosho Ryu Kenpo, en referencia al templo Kosho-Ji, al que pertenecía.
En la actualidad hay una docena de tipos de kenpo que se practican principalmente y con mayor fuerza en Japón, Surcorea, China y Estados Unidos. En Latinoamérica ha captado interés en pocas naciones.
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