En realidad, no será fácil, pero tampoco imposible, pues solo unos pocos deportes faltan por terminar este sábado y Santo Domingo – aunque supera en 12 medallas a Puerto Rico (95)-, está a tres metales del primer lugar de ese país, con 25.
Hoy los dominicanos buscarán su sexto oro en la final femenina de voleibol contra El Salvador, así como tendrá dos presentaciones en karate (Pamela Rodríguez, en menos 68 kilos, y Anel Castillo, en menos 84).
Quisqueya, subsede de la justa multideportiva en El Salvador, conquistó la víspera oro en salto, tenis y kayak, resultados que le permitieron mantenerse en el sexto lugar del medallero de los Juegos reionales, que concluyen este sábado.
En la última jornada del atletismo, la selección de la isla caribeña finalizó su presentación con una medalla de oro en salto de altura (1.86 metros) en poder de Marysabel Senyu, mientras que en el 4X400 la cuarteta femenina se colgó la plata, con un tiempo de 3:27.84, superada por Cuba (3:26.08).
El bronce logrado en el atletismo fue para la cuarteta 4×400 masculina, conformada por Ezequiel Suárez, Juander Santos, Robert King y Lidio Feliz, quienes recorrieron la distancia en 3:02.19, detrás de Trinidad y Tobago (oro, 3:01.99) y Barbados (plata, 3:02.12).
En tenis, el equipo de República Dominicana se alzó con la medalla de oro en un final rompecorazones contra Colombia, con tiempos 6-4, 4-6, 10-6.
En la final de kayak 500 metros varonil, la presea de oro fue para el conjunto de este país, integrado por Rafael Feliz, Cristian Guerrero, Alexander Concepción y Juan Plasencia.
Los dominicanos hicieron el recorrido en la presa El Rincón en 1:28.00, seguidos por los cubanos Robert Benítez, Yan Samé, Reyler Paterson y Julio Hidalgo, merecedores del metal del segundo lugar con 1:28.64.
Una presea de plata aportó el torneo de karate de la mano de Carlos Herrera, en la categoría menos 75 kilos, al ceder por puntos 1-4 ante Allan Maldonado, de Centro Caribe Sports (Guatemala).
En pocas horas los dominicanos sabrán como termina la delegación de su país en el medallero; de cualquier manera, sea en la quinta o la sexta posición, la gran mayoría aplaude la actuación de los suyos y los felicita. La batalla ha sido grande.
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